Washington D. C. es la capital de los Estados Unidos y una de las ciudades más famosas del país. Situada en la Costa Este, entre los estados de Maryland y Virginia, sus calles están llenas de poder e historia y es uno de las ciudades más visitas de USA. Recibe cada año unos 20 millones de turistas, y cada año esa cifra aumenta poco a poco. La capital de Estados Unidos está llena de atractivos que todo viajero debería visitar al menos una vez en la vida, aunque solos nos suene en nuestra mente lugares como la Casa Blanca o el Capitolio este distrito federal requiere de al menos dos o tres días para ser disfrutado por completo.
Todos dicen que es sencillo recorrer este destino. Nació en el siglo XVIII como una ciudad planificada para ser la capital de los Estados Unidos y eso hace que sus imprescindibles puntos de interés estén localizados muy cerca unos de otros. Aunque en la actualidad sea a capital, no siempre fue así. Hasta 8 ciudades han ostentado este título desde 1776, cuando se firmó la Declaración de Independencia. Philadelphia (estado de Pensilvania) , Baltimore (estado de Maryland), Lancaster (Pensilvania), York (Pensilvania), Princeton (New Jersey), Annapolis (Maryland), Trenton (New Jersey) y New York City (Nueva York), han ostentado en algún momento de la historia el título de capital del país.
Volviendo la planificación de este destino, tal es el caso del National Mall, es una explanada de jardines y calles peatonales de unos 3 km de longitud donde se concentran la mayoría de atracciones de la ciudad. Pero simboliza mucho más que eso: los memoriales a grandes personajes estadounidenses son la muestra del camino recorrido hasta conseguir libertades sociales e igualdad de oportunidades (algo así como un homenaje al sueño americano), es el lugar donde Martin Luther King pronunció sus palabras más celebres “I have a dream”, o donde la población se concentró contra la guerra de Vietnam (seguro que te viene a la cabeza la escena de Forrest Gump frente a la Reflecting Pool). Todo un ícono de libertad e igualdad.
Muchas personas, van por el día desde New York, en mi caso particular hice eso. Generalmente vas en tren o en bus, el primero tenes que sacarlo con mucha antelación ya que el precio sube a medida que llega la fecha de salida, el segundo si tenes suerte, podes encontrar tickets por 5 usd. Yo opté por el bus y en 4 hs aproximadamente estaba tocando suelo capitalino. Fui en otoño, no puedo explicarles los paisajes que iba recorriendo mientras caminaba esos 3 km lleno de Museos, y actividades para hacer, las realicé a mi ritmo, tranquila y disfrutando de cada paso recorrido. Lo mas importante a mi entender son las actracciones que les detallo a continuación, imperdibles.
El Capitolio, empecemos por el principio, localizado en el extremo del National Mall. Este gigantesco edificio del neoclasicismo estadounidense alberga el Congreso de los Estados Unidos y seguro que lo viste en mil y una películas. Tiene dos alas, en la norte se encuentra el Senado y en la sur la Cámara de Representantes, donde se reúnen los congresistas.
Otro de los lugares que no tenes que perderte es el Museo Nacional Del Aire y del Espacio, con la colección más grande de artefactos de aviación y naves espaciales del mundo y el más visitado de Estados Unidos (con más de 8 millones de visitantes al año). Está dividido en dos secciones: la historia de la aviación, con, el avión de los Hermanos Wright, el primero en hacer un vuelo controlado y propulsado en 1903, el Spirit of Saint Louis que atravesó el Atlántico en 1927 entre otras aventuras con gran peso histórico.
Seguimos por la Galería de Arte, con pinturas de autores europeos y estadounidenses separados en dos edificios: el oeste con obras desde la Edad Medieval hasta el siglo XIX. Algunos de ellos son Jan van Eyck, Andrea Mantegna, Raffael, Tiziano, El Bosco, El Greco y la única pintura de Leonardo da Vinci en Estados Unidos, Retrato de Ginebra de Benci. Y el este, con arte moderno, con representación de Picasso, Miró, Pollock, Warholl. Además tiene el National Sculpture Garden con esculturas de varios artistas como Miró o Lichtenstein.
El Museo de Historia Natural, el Museo Nacional de la Historia Estadounidense, son lugares menos visitados pero que valen la pena si estas en la ciudad un par de días.
Y si, llegamos a la Casa Blanca o White House, Lo primero que pensas al verla será: “que chiquita” pero la realidad que no lo es, la propiedad cuenta con más de 5.000 m2, 132 dormitorios, baños suficientes para no tener que hacer cola, piscina y hasta un cine. La habitación más famosa es el Despacho Oval, la oficina del Presidente, desde donde decide todos sus movimientos para la Nación.
Particularmente, me gustó mucho el Thomas Jefferson Memorial, este monumento de estilo neoclásico, dedicado al tercer presidente de Estados Unidos. Las mejores vistas son las que se obtienen desde el otro lado del Tidal Basin.
El Monumento a Washington, es un obelisco de 170 metros de altura que se encuentra en el centro del Mall. En 1884, cuando se construyó, era la estructura más alta del mundo (hasta que se terminó la Torre Eiffel 5 años después). Para que te hagas una idea de su tamaño, hoy en día no hay construcción más alta en toda la ciudad. En el interior hay una escalera que te permite subir hasta lo más alto para tener unas vistas de lujo de el Mall.
El Monumento a Abraham Lincoln, se encuentra en el extremo occidental del Mall y es posiblemente el lugar con más carga afectiva de los que visitamos en Washington DC. La enorme figura de Lincoln sentado, reposando sus brazos con una mano abierta y la otra cerrada, sobre la escalinata de un templo de estilo griego, impacta a medida que uno se acerca. En la parte trasera y en su lateral hay grabados con partes de varios discursos que pronunció Lincoln, entre ellos el Discurso de Gettysburg considerado uno de los más poderosos de todos los tiempos.
Esta ciudad es muy emotiva desde punto de vista, tranquila, con mucha historia en su haber, como dije al comienzo, todos tenemos que venir una vez en la vida, realmente vale la pen. Gracias Washington!!
