En italiano Milano, ciudad que ocupa la mayor área metropolitana de Italia y el segundo municipio si de población hablamos, capital de la Región de Lombardía. Se localiza sobre una gran llanura en una de las zonas mas desarrolladas del país, una zona sumamente fértil y de buen clima, sus parques se encuentran muy verdes en las épocas de primavera y verano, permiten el desarrollo de muchas plantas de diversas especies. Además, el toque verde de sus parques se amalgama perfectamente con sus edificaciones góticas y la variada arquitectura que se encuentra distribuida dándole vida a esta preciosa ciudad.
Milán tiene una historia llena de luchas y levantamientos. Fue invadida y destruida varias veces y reconstruida a fuerza de pulmón por sus habitantes y el poder de turno. Una y otra vez se levantó pudiendo recuperar el esplendor de sus primeros años; esto es posiblemente lo más destacable de su historia, esa capacidad innata para sobrevivir y continuar siendo importante en todo el continente. Debemos recordar que a día de hoy, se considera una de las ciudades más desarrolladas de Europa central.
La ciudad es sofisticada y consmopolita, un lugar lleno de posibilidades para cualquier tipo de turista. Se trata de un destino que funciona para el que busca unos días de relax, el que quiere aprovechar al máximo las noches y la vida noctura, el interesado en la moda , las compras y las tendencias, o el que simplemente quiere pasar unas vacaciones en alguna ciudad Europea a buen precio. Así mismo, como capital económica e industrial, tiene el aspecto de una metrópolis moderna, muchos rascacielos ( uno de los mas famosos es el de Pirelli construido en 1959), muchos museos y sobre todo muy buena infraestructura de acceso.
Luego de esta breve introducción, les cuento que he pasado varias veces por el destino a través de su aeropuerto en conexión o a través de algún cambio de tren en su estación principal, pero la última vez tuve la suerte de quedarme 3 días en el Hotel LaGare Milano Centrale MGallery bySofitel, muy cerquita de Milano Central, super cómodo tanto en accesibilidad como en servicios ofrecidos por el lugar. Se localiza a 15 minutos a pie del Centro. Esta fue una de las tantas veces que llegamos y dejamos todo en el lugar para salir a recorrer esta gran metropolis. Todos sabemos que es considerada capital de la moda, como París, caminas y respiras glamour, el vestir de su gente es impecable, todo alineado, todo en composé bien a lo italiano. Todo este brillo lo encontras en varis arterias de la ciudad como ser Corso Venezia, Corso de Porta Ticinese, Via Montenapoleone, Corso buenos Aires y Corso Vittorio Emanuelle II, cada una de ellas te cruzas con marcas de lujo, aquellas internacionales mas accesibles como Benetton, HyM, Zara, etc.
Cuando hablamos de este destino es inevitable no pensar en el símbolo de la ciudad, El Duomo de Milano, casi les diría se ve en gran parte de la ciudad, considerada una de las más grande, donde se practica el culto católico, tiene 157mts de largo con capacidad hasta 40.000 personas. De estilo neogótico, esta catedral comenzó a construirse en 1386 y finalizó en 1965. Es algo tan impactante, llena de detalles, la utilización de mármol por doquier hace que esta construcción sea única e irrepetible en toda Europa. La foto ideal la sacas desde la plaza del Duomo, parece un cuadro.
A pasitos encontras la gran entrada triunfal a las famosas Galerías Vittorio Emanuelle II, esos arcos de medio punto te invitan y te llevan a ver esos techos totalmente vidriados, brillantes, esos muros totalmente pintados y pisos de mármol, al entrar no sabes por donde comenzar a mirar, todo te deslumbra. Tenes tiendas de ropa, cafecitos y una heladería espectacular, imposible no comprar un heladito de chocolate. Esa noche fuimos a cenar a Niko Romito Space Milan, en el primer piso de las galerías con vista directa a la Catedral, soñado, comimos una pasta con cordero exquisita, si pueden vayan, no se arrepentirán.
Es una ciudad para caminarla todo el día, donde vas descubriendo rinconcitos que terminas adorando, no necesariamente son los mas turísticos, es muy subjetivo, mismo pasa con los cafecitos para hacer stop y poder descansar de tanta caminata. Nos habían recomendado un barrio muy concurrido, en auge, muy pintoresco, la característica principal es que esta lleno de canales sin ser Venecia ni Amsterdam, hablamos del barrio Navigli, que decirles, muy muy lindo, lleno de restaurantes a la vera de estos canales, vale la pena ir, tenes que tomarte un tranvía ahí en la Piazza del Duomo y en 20 minutos llegas sin problemas. Alli mismo podes pasear en bicicleta, si vas con tiempo, lo imperdible es casar fotos por cada lugarcito que comprende el barrio, no te arrepentís en absoluto.
Otro de los atractivos de mayor interés, sin dudas, es la Scala de Milano, un teatro monumental, dedicado a la ópera, mucha historia, muchos artistas han pasado por acá, podes comprar los tickets y realizar la visita guiada por sus instalaciones algo único, vale la pena ir.
Milán es una ciudad para amarla desde el día 1 que desembarcas, su historia, su arquitectura, su estilo, sus barrios, hacen que caigas a sus pies, enamorándote hasta el final, debería estar en una de las ciudad para visitar alguna vez en la vida, agradezco haber tenido la oportunidad de conocerla y poder disfrutarla a pleno.
