El 19 de junio de 2020 falleció Carlos Ruiz Zafón. Había nacido en España en 1964 y es uno de los escritores mas leídos y traducidos de la lengua hispana, después de Cervantes.
No siempre fue un autor contemplado por el mundo literario. Su trabajo se desarrollaba en el mundo publicitario como director creativo, pero en 1992 se lanzó como escritor para el público juvenil (“La trilogía de la niebla”, “Marina” (1999), “El palacio de la medianoche (1994), “Las luces de septiembre” (1995) y “El príncipe de la niebla” (1993).
Su obra más conocida fue “La Sombra del Viento (2001). “Todavía recuerdo aquel amanecer en que mi padre me llevó por primera vez a visitar el Cementerio de los “Libros Olvidados”.
Allí nace una historia única junto a otros relatos que se entrelazan, un amanecer del año 1945 Daniel (Sempere) es guiado por su padre hasta: el Cementerio de los “Libros Olvidados”. Allí descubrirá misterios y secretos que anidan en su ciudad (Barcelona) desde mediados del siglo XX hasta la oscuridad de la post guerra, que se desgranan en su texto favorito, ese libro elegido, ese libro maldito: “La Sombra del Viento”, donde su autor Julián Carax deja flotando en el aire que “El Diablo” es el causante de los incendios intencionales de sus obras. Así Zafón logra que esta combine la intriga, el suspenso, la novela histórica y el amor lastimoso.
“El juego del ángel” (2008) es una consecuencia de “La Sombra del Viento”, pero ambos pueden ser leídos de manera independiente. En “El juego del ángel”, David Martín trabaja en el periódico La voz de la Industria de Barcelona. Al comenzar a relatar historias de crímenes en la sección llamada Los misterios de Barcelona, David se convierte en un famoso escritor y la historia se despliega luego que Andreas Corelli (un siniestro y oportunista editor) le proponga escribir el libro de su vida. Sería algo así como hipotecar el alma o vendérsela al diablo.
“El Prisionero del Cielo” (2011) forma parte de la saga de “La Sombra del Viento” y es un libro con un final abierto que invita a la continuación hilvanado para tejer otra historia: “El laberinto de los espíritus” (2016). Esta novela negra da por terminada la saga. Ella nace y se recrea en la Barcelona de los años cincuenta. Daniel ya recorrió un camino y como adulto, ahora es el dueño de la librería Sempere. Allí también colabora, Fermín, su amigo, Bea, su esposa y el padre de Daniel. Ahora los asesinatos estarán enmarcados en la oscura época española del régimen franquista. Alicia Gris será la detective (y espía a la vez) que prestará sus conocimientos para intentar desatar los nudos de estas horrendas historias.
Como la mayoría de las sagas de este último libro, la trama parece desperdigarse y los detalles y personajes incrementarse proporcionalmente a la cantidad de páginas (928 en total). Aunque paradójicamente quizás su personaje mas acabado, digno de toda nuestra comprensión sea Alicia Gris, una chica a la que la Guerra Civil le ha quitado todo, hasta su aliento.
“Alicia Gris ve lo que los demás no ven. Su mente funciona diferente al resto. Donde todos los demás ven una puerta cerrada, ella ve una llave. Donde los demás pierden la pista, ella encuentra el rastro. Es un don, por así decirlo. Y lo mejor es que nadie la ve venir”. (El laberinto de los espíritus).
