Cuando parecía que empezaría la flexibilización administrada en el país y de a poco se podrían normalizar algunas actividades el Congreso de la Nación se prepara para la primera sesión virtual de su historia. Mientras en el país cae la economía estrepitosamente, el riesgo país ya sobrepasó las nubes inclusive y el dólar se disparó, la política parece no entender del todo la situación y realiza una inversión millonaria en el congreso para que los legisladores puedan sesionar virtualmente cuando este año solo fueron al recinto para escuchar el discurso del presidente de la Nación.
La pregunta que surge es si ¿realmente es necesario semejante gasto en tecnología? Una vez más parece que la política o los políticos para ser mas ecuánime se aleja de la gente. Apenas empezó la cuarentena el propio Massa habló de una reducción en las dietas que sería destinado a la Cruz Roja, el presidente de la cámara planteaba aplicar un recorte en las dietas de los 257 integrantes de ese cuerpo, a modo de gesto, en medio del parate económico por el coronavirus: un 40% de quita adicional a las reducciones en concepto de viáticos y pasajes durante el mes de marzo.
Por supuesto que esto no ocurrió y ahora el congreso invierte en tecnología para realizar una sesión virtual y quedar en la “historia” como la primera que se realiza en el país, si bien no se dieron a conocer los números de dicha inversión lo que si es cierto es que no parece ser ni por asomo el gesto del cual las mismas autoridades hablaban a principios de la pandemia.
Donde quedo aquella idea de Massa que analizaba también la suspensión de asesores en Diputados y el remate de autos que se sumarían a la restricción de pasajes y de esa manera armar un fondo de $ 200 millones en cinco meses que se destinarían a instituciones de la salud. Todo eso parece haber quedado en el tintero y hoy la preocupación esta dada en mostrar una cara totalmente distinta a la de austeridad.
A eso podemos sumarle el plus salarial “Por emergencia sanitaria” a los personal legislativo que equivale a 13,56 módulos por día de efectivo cumplimiento de tareas (serían unos $ 2.274 por día) y les será otorgado a los empleados que hayan concurrido al Palacio Legislativo desde que se declaró la cuarentena. Incluye el lapso transcurrido entre el 20 de marzo y el próximo 10 de mayo -cuando vence esta nueva etapa de la cuarentena-, «pudiendo ser prorrogado”. Mientras que a los médicos y trabajadores de la salud el gobierno les pagó un bono de 5 mil pesos por única vez (por lo menos hasta el momento).
En este momento donde todos los argentinos están haciendo grandes sacrificios, y las micro, pequeñas y medianas empresas se encuentran en una situación crítica, ¿es realmente necesario este tipo de desiciones? ¿No sería conveniente asignar esos recursos a otros sectores para la recuperación económica del país?.
Hasta que la clase política no deje de mirarse el ombligo va a ser muy difícil poder despegar, este “avión” hace años que carretea pero el despegue está cada vez mas lejos y en lugar de tomar velocidad para hacerlo parece que reduce la marcha con la firme intención de quedar siempre en la pista.
