En la lista de postres tradicionales argentinos no puede faltar La Pasta frola. Famosa por ser una de las tartas dulces más populares de nuestro país además del acompañamiento ideal para el mate, el té o el café, puede venir rellena con membrillo -en su versión clásica-, con dulce de batata o con dulce de leche.
El término “pasta frola” deriva del italiano “pasta frolla”, que se traduce como pasta brisa, que es el tipo de masa con el que se prepara la crostata, dulce típico italiano que podría haber sido el origen de esta receta sudamericana. La historia de esta tarta comenzó en Italia, pero cuando llegó a la Argentina su receta se fue acomodando a nuestros gustos y tradiciones. Sobre todo se asoció muy bien a las fiestas patrias y feriados. En la versión italiana se elabora con frutas frescas, dulces, crema pastelera, nutella o ricota.
La Pasta frola
La masa de la famosa tarta es una masa quebrada que se rompe en cuanto se corta. La característica principal es que la cantidad de harina puede igualar a la cantidad de manteca. La masa se dispone fina en el molde de tarta, no más de 5 mm. A mí me gusta una masa sablée porque queda crocante, es mantecosa y va muy bien con la acidez del membrillo; y al no tener polvo de hornear no queda muy masacote. Yo las suelo estirar de 4-5 mm, así queda delicada.
Cada familia tiene su propia receta de pasta frola, pero vamos a compartir la de Doña Petrona, una de las cocineras de televisión más populares de la Argentina en la década del 70, una gran referente con una receta fácil de Pasta frola.
Ingredientes:
Para la Masa
Harina de trigo 0000 400 g
Bicarbonato de sodio 1/2 cdita
Azúcar 4 cdas
Manteca 150 g
Yemas 2
Esencia de vainilla
Ralladura de limón
Un poquito de agua
Para el Relleno
Dulce de membrillo 400 g
Agua caliente 150 cc
Oporto 100 cc ¾ de taza
Preparación:
Colocar en un bol la harina de trigo junto con el bicarbonato, el azúcar y la manteca blanda.
Trabajar con las manos y añadir las yemas de a una.
Mezclar y añadir esencia de vainilla, la ralladura de limon y agua un poco.
Trabajar con las manos hasta obtener una masa lisa. Reservar la masa en el refrigerador, retirando una hora antes de utilizar.
Estirar con un rodillo sobre la mesada espolvoreada con harina y forrar el molde. Reservar el resto de la masa.
Para el relleno, colocar en una cacerola el membrillo con un poco de agua caliente, junto con el oporto. Presionar con un pisa puré hasta obtener una preparación con consistencia de crema. Retirar del fuego y dejar enfriar.
Verter el relleno frío o tibio jamás caliente, dentro de la masa y alisar.
Estirar la masa restante y cortar tiras delgadas. Colocar sobre el relleno formando un enrejado.
Pincelar las cintas de masa con huevo batido y llevar al horno a 180° C por 40 minutos.