Continuando con la magnífica región que comenzamos a recorrer la semana pasada, como les había comentado, existe una selección de más de 50 castillos de estilo renacentista, declarados Patrimonio de la Humanidad, están situados cerca de la orilla del río del Valle del Loira, también conocido como el jardín de Francia por su belleza y son una de las zonas más increíbles del país. Además poder de visitar los cuidados interiores, con mobiliario de la época y sus perfectos jardines, merece la pena alquilar auto para recorrer con total libertad los hermosos paisajes de viñedos que los rodean y así hacer una ruta lo más completa posible.
Aunque cualquier momento es bueno para visitar el Valle, podríamos decir que la mejor época es entre abril y junio y entre septiembre y octubre, cuando llueve menos y los paisajes y jardines presentan los mejores colores, sobre todo en primavera.
La duración de una ruta por el valle, que incluya los castillos del Loira más lindos, te puede llevar alrededor de una semana, saliendo desde París y llegando al primer castillo en unas dos horas. Si no tenes tanto tiempo podes reservar una excursión de un día con guía en español desde París que incluye los dos castillos más famosos, el Castillo de Chenonceau y el Castillo de Chambord, los cuales les describí la semana pasada.
Nos faltaron algunos más por visitar, tal es el caso del Castillo de Cheverny, conocido por los amantes del cómic Tintín, ya que fue uno los lugares que inspiraron a su creador Hergé. Este castillo está considerado como uno de los más elegantes del Valle del Loira. Además de su interior, te recomiendo no perderte el museo, los jardines y dar un paseo por el increíble bosque que lo rodea, con más de 100 hectáreas.
Construido en el siglo XI, para ser reconstruido en estilo gótico en el siglo XII, el Castillo de Saumur es el ejemplo perfecto de castillo de cuento, que cualquiera de nosotros tiene en mente cuando piensa en viajar al Valle del Loira. Además de su increíble historia y su interior, de este castillo destaco las impresionantes vistas que se tienen de la localidad y los alrededores.
El Castillo de Chaumont-sur-Loire, para mí, este es otro de los más hermosos y por supuesto, uno de los imprescindibles que no podes perderte de visitar. Construido entre los siglos XV y XVI, perteneció a Catalina de Médicis y además de su interesante interior, te recomiendo no perderte las vistas desde su terraza y las vistas del propio castillo desde sus jardines.
El Castillo de Villandry es el último que se construyó y podemos decir que se ha convertido en uno de los más visitados gracias a sus jardines repartidos en tres niveles, que se consideran como uno de los más increíbles de Francia e incluso, del mundo. En este caso, aunque su interior también es recomendable, la entrada queda más que justificada aunque solo sea para ver los jardines.
Conocido por ser el castillo que inspiró al escritor francés Charles Perrault para escribir su famoso cuento “La Bella Durmiente”, el Castillo de Ussé se reconstruyó durante la época renacentista y es una de las residencias reales que destacan tanto por su mobiliario como jardines y una preciosa capilla, te aseguro, será de las más lindas que podes ver al viajar al Valle del Loira.
El Castillo de Blois, antigua residencia de los reyes de Francia, es un edificio majestuoso que destaca por reunir varios estilos arquitectónicos: gótico, gótico flamígero, renacentista italiano y clásico. Un maravilloso abanico de la arquitectura francesa. Entre las maravillas de este castillo figuran el portal, rematado por una estatua ecuestre de Luis XII, el espléndido patio interior, con sus cuatro alas de épocas y arquitecturas diferentes o la fastuosa escalera de caracol del ala Francisco I.
El Castillo de Langeais es uno de los más interactivos del Valle del Loira. Lejos de ser solo un vestigio del pasado, el interior presenta recreaciones fieles no solo de los muebles y el arte que alguna vez se encontraron en las habitaciones, sino también de la iluminación de época correcta, maniquíes con trajes de época y visitas guiadas que dan vida al pasado ante los ojos de los visitantes. Además, los terrenos incluyen un paseo con una plataforma de observación, actividades para niños y un espectáculo nocturno que lleva a los huéspedes a través de las habitaciones y descubre los «secretos» del pasado. Y aquellos que lleguen temprano o se vayan tarde pueden ver que el único puente levadizo manual que queda en Francia se abre y cierra los terrenos.
Así cierro una región llena de historia, arte; un camino panorámico con días soleados espectaculares donde cada Castillo le aporta un dejo de sabiduría y cultura a nuestro ser, Gracias por dejarme contemplar la mejor arquitectura del Valle del Loira!