Firenze como la llaman en Italia, es una ciudad espectacular desde cualquier punto de vista que se la mencione. Capital de la Región de la Toscana, fue durante muchos siglos el punto neurálgico de la cultura artística italiana y europea, dan testimonio de todo esto sus numerosos museos, palacios, iglesias y monumentos. Delineada por dos colinas y atravesada por el río Arno, Florencia es una ciudad que supo mantener su patrimonio histórico a la perfección y convertirse al mismo tiempo en un foco emergente de la cultura moderna. Sin dudas, es una de las mas importantes del mundo o de las mas señoriales sin duda.
Si hablamos de historia, fue la capital italiana entre 1865 y 1871 durante la Unificación Italiana, en la Edad Media fue un importante centro cultura, económico y financiero. Conoció su época de mayor esplendor luego de la restauración del Gran Ducado de Toscana bajo el dominio de la dinastía Medici. Aquí mismo fue donde se originó el gran movimiento artístico denominado ni mas ni menos que el Renacimiento, se la considera una de las cunas mundiales del arte y de la arquitectura. Su centro histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1882, y en él permanecen obras medievales y renacentistas tales como la cúpula de Santa María del Fiore, El Ponte Vecchio, la Basílica de Santa Cruz (Santa Croce), el Palazzo Vecchio y varios museos como el de Los Uffizi, el Bargello o la Galería de la Academia, mas adelante hablaré de ellos.
Como siempre digo, tuve la suerte de visitar este destino en varias oportunidades, me marcó mucho mi profesora de arte en la universidad, esas personas que te enseñan con pasión a tal punto que te transmiten algo de ese amor por el arte. La manera mas rápida y fácil de acceder es a través del tren, este servicio es muy bueno en toda Italia, una de mis visitas las hice desde Roma, de hecho lo tomé en Termini, en una hora y media recorrí 232 km a no se cuantos kilómetros por hora, la estación de arribo es Sta María Novella, nombre que lleva una de sus iglesias. Su estación parece un hormiguero, en el sentido de la cantidad de gente que va y viene, vale decir que vos no te enteras en cual anden llega tu tren hasta 5 minutos antes de su partida, entonces muchas personas están frente a las pantallas atentas a que le informen su anden (binario en italiano) para salir rapidísimo a dicho lugar.
Luego de esta breve introducción, podría hablar semanas de este gran lugar cultural, lo loco es sentir el arte por donde camines, desde sus callecitas empedradas, sus iglesias cada dos cuadras, su arquitectura citadina tirando a lo medieval y renacentista. Me alojé en el Hotel MGallery Cerretani Firenze by Sofitel, a pasitos de la Catedral, el cuarto tenia un cuadro central ovalado típico renacentista, es el día de hoy que lo recuerdo, habitaciones de estilo clásica, el personal muy cálido y atento. Lo bueno de esta ciudad es que podes recorrerla íntegramente a pie, uno de los atractivos mas reconocidos es la plaza del Duomo, Santa MAria del Fiore, donde se encuentra la Catedral de Florencia con gran riqueza artística, con su Cúpula realizada por Brunelleschi, el Batipsterio y la Torre campanario, este conjunto arquitectónico se ve desde cualquier punto de la ciudad, el mármol esta por donde lo mires, paredes, pisos, todos pertenecientes a la misma región. Es inmensa y vale ir a conocerla una vez en tu vida, no te vas a arrepentir. Desde aquí convergen muchísimas callecitas empedradas que te van conectando con los demás sitios de interés que hacen a Florencia ser el centro del Renacimiento. La Plaza de la Signoría es el centro del poder político de la ciudad, donde se encuentra el Palazzo Vecchio sede actual del ayuntamiento y la Loggia de Lanzi, pórtico con gran carga histórica, lleno de esculturas de gran tamaño. En el mismo sector encontramos la famosa galería de los Uffizzi, museo donde encontras la mayor colección de arte de la historia italiana y mundial, podes comprar los ingresos online de esta manera evitas las largas filas. Sus exteriores están llena de columnas, otra vez de esculturas de gran tamaño, es un recorrido al pasado. Si seguís caminando por ese pasaje, llegas al Río Arno, y si miras a la derecha, nos encontramos con el famosísimo Ponte Vecchio, uno de los iconos asociados a la imagen de Florencia. Fue mandado a construir por los Medici en 1565, se trata de un largo pasillo cerrado que unía el Palazzo Vecchio y el Palazzo, Pitti. Su imagen característica se debe a la disposición de tiendas de joyería y orfebrería a ambos lados del puente. La imagen se completa con el color amarillo de todas sus fachadas, sobre todo se resalta con la luz del atardecer, vista que merece ser disfrutada desde el puente de Santa Trinitá. Un dato importante, el Ponte Vecchio no fue destruido en la Segunda Guerra Mundial, como sucedió con el resto de puentes de Florencia, se dice que el propio Hitler dio la orden de que se respetase. En el medio del puente se encuentra la estatua del celebre orfebre Benvenuto Cellini. Es un lindo lugar para sacar fotos y tener una linda vista panorámica.
Esta ciudad te enamora por completo desde le primer momento que pisas el adoquín con años de historia, la gente es amorosa, dedicada al turismo 100% no hay manera que la pases mal, de hecho es un disfrute minuto a minuto. Los espero la próxima semana con mucho más del este lugar increíble…