Muchos conocedores de la literatura contemporánea, consideran aún hoy que Philip Roth fue ignorado intencionalmente por la gran academia sueca. Ese galardón no llegó a su vida, sin embargo siempre figuró en la lista de los posibles ganadores. Muchos nominados y pocas expectativas para Philip. Allá lejos permanecieron sus deseos. Así fue que falleció en Nueva York un 22 de mayo de 2018 sin haber sido premiado, parece haberse cumplido el viejo adagio: el que espera, desespera. Ello demolió su paciencia y su vida.
Publicó su primer libro en el año 1959 y este llevó por título “Goodbye, Columbus”, el cual está compuesto por un conjunto de cinco cuentos y una novela breve. Ya asomaba su mirada irónica y crítica.
Este joven Roth se abría al mundo de los escritores de la mano del análisis de las diferencias de clases, sus relaciones y las infinitas combinaciones dinámicas entre ellas.
Luego vinieron mas creaciones: “El teatro de Sabbath”, “El lamento de Portnoy”, “Nuestra pandilla”, etc.
“Elegía” fue publicada en 2006. Este relato largo nos hace conocer la vida de un personaje sin un nombre específico, que muere al comienzo de la obra. No obstante, allí todo comienza. Él reflexiona sobre los acontecimientos que lo han llevado a vagabundear por la vida.
Muerte y vida, temas recurrentes en la literatura de Roth.
La savia de este personaje corre unida a varios matrimonios, infidelidades, traiciones, hijos ausentes. Una vida común y corriente. El inicio de su funeral no trae tristeza al relato sino burbujas de realidad y verdad aumentada.
“De haber sido consciente del sufrimiento mortal de cada hombre y cada mujer a los que había conocido durante sus años de vida profesional, de la dolorosa historia de pesar, pérdida y estoicismo de cada uno, de miedo, pánico, aislamiento y terror, de haber conocido cada cosa que les había sido arrebatada y que en otro tiempo había sido vitalmente suya, y la manera sistemática en que eran destruidos habría tenido que permanecer junto al teléfono todo el día hasta la noche, haciendo otro centenar de llamadas por lo menos. La vejez no es una batalla; la vejez es una masacre”. (Elegía)
“La Mancha Humana” fue publicada en el año 2000. Quién no recuerda con un gesto mordaz el caso Clinton-Lewinsky y el despacho Oval. Roth encuadra su novela en la moral extrema que invadió el Congreso, los medios y la sociedad de los Estados Unidos en esa época. Zuckerman es el escritor y cuenta la relación de Coleman Silk y su amante Faunia Farley, desde el estereotipo de la mujer joven y el señor poderoso. Pero su hombre esconde un secreto.
Roth retrató minuciosamente la vida del varón contemporáneo, la esencia de la mentira, el desparpajo, la muerte del pudor, la necesidad imperiosa de triunfar a como dé lugar.
“Nemésis” fue publicada en el año 2010 y se constituyó en la última obra escrita por Roth. Allí Eugene Bucky Cantor es un joven atleta de un colegio judío. La Segunda Guerra Mundial comienza y él no ha podido ingresar al ejército. Su vista “defectuosa” es la causa. Su espíritu sufre por esto ya que todos sus amigos se encuentran en el frente de batalla. Nada sale como Bucky lo esperaba. Su culpa lo atormenta con una dimensión dramática.
Este autor prudente y entendido, pero que después de haber leído su primer libro apasiona, logró condensar lo complejo de varias situaciones con la simpleza de lo que ocurre así, de manera inesperada, pero contundente. Esa forma asombrosa en la que cambia la vida en un instante, allí donde muere la planificación. Ese mismo proyecto de llegar a ser premio Nobel que nunca se concretó.