Periodista de Tierra del Fuego.

Desde que inició la cuarentena venimos hablando del impacto económico en el país, la provincia y principalmente, en el sector turístico. Este sábado el INFUETUR habilitó el turismo interno y se presentaron dos realidades bastante opuestas: mientras Tolhuin presentó un 60% de reserva en los hospedajes, Ushuaia atraviesa una posición mucho más compleja. Si analizamos el origen de la demanda veremos que Tolhuin históricamente se abasteció de visitantes de la provincia, por lo que ahora operan en una situación relativamente normal. Ushuaia, en cambio, depende principalmente de dos tipos de turistas: el de AMBA y el brasileño. Con la provincia de Buenos Aires y Capital Federal volviendo a la fase 1 de la cuarentena a priori hasta el 17 de julio (con grande chances de extenderse) y Brasil proyectándose como el segundo país con más contagios a nivel mundial; los pronósticos no son buenos. Si bien es cierto que la temporada invernal no es la más fuerte para el destino Ushuaia, genera ingresos para que el sector se sostenga hasta el plato fuerte: enero.

El presidente de la Cámara de Turismo de la Provincia, Ángel Brisighelli, dejó una frase tan dura como cierta: “es mucho más caro tener un hotel abierto y vacío que cerrado”. A pesar de los intentos del INFUETUR por reactivar, resulta difícil sostener la actividad. El presidente de la Cámara sostiene que salvo los emprendimientos de tipo familiar el resto permanecerá cerrado, “los hoteles más importantes necesitan oferta y demanda para que el mercado funcione”.

Descartemos por el momento el turismo internacional, recién en julio comenzará la actividad en Europa, que se encuentra mucho más avanzado en el transcurrir del virus, mientras que Argentina transita su pico. En lo que refiere a turismo nacional debemos descartar a los distritos que concentran más del 55% de la población del país. Si bien se han realizado gestiones para que en la primer quincena de julio lleguen vuelos de Córdoba y Buenos Aires no alcanzan a generar suficiente demanda para cubrir la oferta de camas de la ciudad.

Desde la Cámara no se cuestiona la medida de los vuelos, pero entienden que es más simbólico que una mejora sustancial a la situación. El año pasado cómo mínimo ingresaban entre 3 y cuatro vuelos diarios, ahora hablamos de la misma cantidad a lo largo de 15 días. Si a ello le sumamos que la perspectiva para diciembre será de menos tránsito aéreo tras la retirada de los vuelos internos de Latam, aunque en diciembre la situación tenga cierto grado de normalidad, no se podrá trabajar para recuperar los meses perdidos. A esta problemática se le suma el planteo de la Asociación de Profesionales del Turismo; que cuenta con más de 250 guías inscriptos en INFUETUR. De esos 250 el 85% está radicado en la provincia y hoy no puede ejercer su profesión. Durante estos meses quizá algunos de ellos pudieron acceder al Ingreso Familiar de Emergencia, pero el mismo dejará de ser válido para los territorios que no se encuentren en cuarentena. La situación es compleja y tampoco depende mucho de factores que sean controlables por las organizaciones mencionados, sino de la cuestión sanitaria.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here