En el fútbol de salón son muy pocos los jugadores que son respetados y admirados por sus clásicos rivales, equipos de distintas federaciones e inclusive en todo el país. La liga ushuaiense de la Confederación Argentina de Fútbol de Salón (CAFS) tiene la suerte de poder seguir disfrutando cada fin de semana de un histórico jugador de este deporte, Marcelo “el Chelo” Sánchez, una gloria del futsal local y de Magallanes Azul.
La riquísima trayectoria del “Chelo” Sánchez en este deporte comenzó cuando apenas tenía cinco años de edad. Sí, desde cuando iba a jardín ya amaba y jugaba con “la caprichosa”. Pero su talento se desarrolló recién cuando fue a la escuelita infantil de futsal del actual concejal Hugo Romero, quien en 1990 junto con el histórico José “Cocol” Gómez enseñaban a los más chicos el “abc” de esta disciplina deportiva. Luego, siguió en la categoría de cadetes en el Club Ateneo bajo las órdenes de Romero.
Si bien el capitán de Magallanes Azul desde muy temprana edad le encantaba jugar al fútbol de salón, también practicó otros deportes antes de elegir definitivamente con el que consiguió muchos trofeos y viajó por distintos lugares del mundo.
-“Hice un montón de deportes cuando era chico, jugué al básquet, handball, después al rugby pero a medida que uno va creciendo los horarios personales van coincidiendo con una actividad. La decisión de inclinarme por el fútbol fue cuando empecé a participar en torneos nacionales y clubes en los que me fue bastante bien, yo creo que eso pesó a la hora de decidir por el futsal”.
Una vez terminada su experiencia en el conjunto verde, Sánchez comenzó a jugar de manera más competitiva en el club Luz y Fuerza a partir del 2002, con el que logró su primer campeonato de primera división de la Federación ushuaiense de fútbol de salón en la temporada 2003/2004 tras derrotar en la final nada más ni nada menos que a Magallanes Azul.
Alejandro Velázquez, actual dt de Magallanes Azul, fue técnico del “Chelo” en la selección cadetes de Ushuaia. Él siempre invitó a Marcelo a ser parte del equipo de Magallanes azul pero el histórico jugador decidió estudiar en el 2005 el profesorado de educación física en Córdoba. Aunque, las cosas no se le dieron como él esperaba por lo decidió volver a Tierra del Fuego y en 2006 se sumó al conjunto múltiple campeón.
-“Hubo un año en el que me fui a estudiar, venía de hacer muchas competencias y torneos porque jugaba al básquet y al handball a la vez, la verdad es que no me adapté estudiar directamente y no estar compitiendo. Por eso me volví y ahí fue cuando Alejandro (Velázquez) me dijo que era la oportunidad, que no la desperdicie y la verdad es que no la erró. Así que a partir del 2006 juego en el club Magallanes que hoy en día es mi segunda casa”.
En Magallanes Marcelo se convirtió poco a poco en un líder indiscutido e ídolo del club, con el que ganó desde el 2006 hasta la fecha varios torneos locales, como provinciales desde el 2008, 2009, 2011 y 2012 e inclusive, un campeonato nacional CAFS en 2016.
Pero sin lugar a dudas, el logro más recordado y valorado por él y la hinchada de Magallanes fue el subcampeonato intercontinental de la Asociación mundial de Fútbol de Salón (AMF) que se disputó a mediados de mayo del 2017 en la ciudad de Lloret de Mar, Cataluña. En aquella copa del mundo los ushuaienses perdieron en la final ante Colorado de Brasil 2 a 1.
-“Desde que llegué tuve muy lindos sentimientos. Empecé a jugar un torneo de liga de honor, comencé a enfrentarme ante los mejores. Tuve la responsabilidad de ser el capitán del equipo ante jugadores de mucha experiencia, eso me dio la chance de jugar un mundial con la selección Argentina, torneos internacionales y ser un poco lo que soy hoy, reconocido y que los chicos quieran verse reflejado en uno.
Se nos dio todo en tres años, ser campeones de la división de honor, jugar un torneo internacional, un sudamericano y salir subcampeones en el mundial de clubes. La verdad es algo que no se compara con nada”.
El gran nivel que adquirió Sánchez con su querido Magallanes le abrió las puertas para jugar profesionalmente en dos clubes colombianos como Bucaramanga (2010) y en Esmeralda Chiquinquirá (2014) como también en un torneo sudamericano con Astemios de Uruguay (2017) con el que se quedó con la presea plateada. Además, tuvo la oportunidad de formar parte del plantel de la selección nacional de futsal CAFS que ganó la medalla de bronce en el mundial AMF que se jugó en Colombia en el 2011.
-¿Cómo fue tu paso por el fútbol de salón Colombiano?
-“La verdad es que es otra cosa. Ahí fue la primera vez que me sentí un jugador profesional, ya sea por levantarme y sólo tener que ir a entrenar, descansar en un hotel, que te pasen a buscar para viajar y enfrentar a los mejores. Es una cosa que a veces uno lo ve tan lejos que no se lo imagina, fueron momentos muy satisfactorios para mí porque pasé de ser un jugador amateur a ir a una liga en la que sos profesional, te pagan y vivís para eso nada más”.
Su visón sobre el futsal local:
El experimentado jugador de Magallanes reconoce que este deporte creció notablemente en Ushuaia tanto en las categorías mayores como en las menores y mejoró en cuanto a la organización de los torneos como de cada club que milita en la primera o segunda división de la federación local.
-“Veo muy bien el desarrollo del futsal, hay jugadores de mucha trayectoria que vienen desde las categorías infantiles de la federación. La verdad es que hay futuro por delante con mucha calidad y formación, hoy los entrenadores preparan mucho antes dirigía cualquier papá. Ahora la mayoría de los equipos tienen preparador físico. Tenemos un futuro asegurado por muchos años, eso me deja tranquilo”.
