“Creemos no equivocarnos, las resonancias del corazón nos lo advierten. Estamos pisando sobre una revolución, estamos viviendo una hora americana”. De esta manera finalizaba el primer párrafo del Manifiesto liminar de la reforma universitaria del 15 de Junio de 1918, publicado 6 días más tarde por La gaceta universitaria de la Universidad de Córdoba.
100 años se van a cumplir de aquella reforma que cambió para siempre la forma de acceso y vida a la universidad no sólo de nuestro país, sino que también ejerció como puntapié para diferentes procesos de readecuación del sistema educativo superior en muchos países de Latinoamérica.
Hoy a 9 días de conmemorar el centenario de aquel logro, lejos se está de un clima de festejos y alegría. Por el contrario, existe tensión y preocupación por sostener lo que se pudo lograr desde ese momento hasta hoy. Y esto se presenta tras los dichos de público conocimiento por parte de las máximas autoridades políticas del país y la reciente declaración que se dio a conocer de la Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires.
La consternación no difiere del ámbito nacional por parte de los alumnos y profesores de la UNTDF (Universidad Nacional de Tierra del Fuego) creada en noviembre de 2009 con la sanción de la Ley 26.559, que funciona desde 2010.
Antonio Cicioni (Docente investigador del Instituto de Educación y Conocimiento de la UNTDF AIAS) en diálogo con “El Copérnico” nos dice que “El principal desafío para la UNTDF es consolidarse en su proyecto educativo, a fines de lograr cada año un mayor y mejor aporte en pos del objetivo de lograr el desarrollo inclusivo en Tierra del Fuego. Esto incluye expandirse en cantidad de carreras, seguir mejorando la calidad de nuestra actual oferta, y lograr una eficaz articulación con el estado y la sociedad civil fueguinos” al referirse a la principal problemática que afronta hoy la Universidad.
Ante los paros que se estuvieron realizando en el transcurso del año y los reclamos para “poder hacer las obras edilicias ya comprometidas y que el Gobierno Nacional priorice la educación en todos los niveles”, por parte de los docente en el que piden no perder poder adquisitivo, Antonio resalta el “apoyo de la sociedad fueguina, lo cual refuerza nuestro compromiso y sentido de la responsabilidad” Y agrega “la mejor respuesta es ver cómo aumenta cada año la cantidad de jóvenes que eligen quedarse en la isla para estudiar en la UNTDF”.
También nos pusimos en contacto con Juan Delgado (Miembro del centro de estudiantes y representante por el claustro de estudiantes en el Consejo Instituto de Sociedad y Estado) quien nos cuenta que “Desde el centro de estudiantes observamos los fenómenos que se vienen dando y las noticias que vienen saliendo en los medios de comunicación en los últimos meses, esto en el marco de lo que entendemos es un avance contra la educación pública. Nos preocupa, entendemos que esto también viene sucediendo en los distintos niveles educativos y que hay que entenderlo en el marco de esa disputa, porque la Universidad no está aislada de lo que ocurre en el país”. En cuanto a las acciones que se vienen tomando por parte del centro de estudiantes destaca la visualización que realizan de estos problemas.
Ante las declaraciones de funcionarios con importante representatividad a nivel nacional sobre la Universidad Pública. ¿Qué siente como parte de la misma?
Cicioni: “El modelo universitario argentino es reconocido en todo el mundo, por la gratuidad de los estudios, el autogobierno de las universidades, y la calidad de las y los profesionales que produce el sistema. Lo que hoy sufrimos es un nuevo intento neoliberal por dar marcha atrás en el derecho a los estudios universitarios -derecho conquistado por generaciones anteriores- Nos queda a las actuales generaciones volver a impedir los periódicos intentos de las fuerzas anti-igualitarias”.
Delgado: “Creemos que la universidad pública en la Argentina, es una herramienta fundamental de la transformación del orden social para generar movilidad educacional ascendente entre sus estudiantes. Es una herramienta fundamental para hacer que aquellos que menos tienen, puedan pasar, a través de la universidad, a vivir un poco mejor. En ese sentido, vemos con agrado las movilizaciones que se van efectuando en las últimas semanas y meses, que comienzan a establecer resistencias al avance contra el poder adquisitivo y los derechos de los trabajadores”.
¿Existe riesgo en el futuro de la Universidad Pública y en particular con la UNTDF así como la conocemos?
Cicioni: “El riesgo está porque los intereses en contra de la universidad gratuita argentina van más allá de nuestras fronteras, para llegar al corazón del poder neoliberal. El pueblo argentino sin embargo es consciente de lo que tiene. En su capacidad de defender derechos estará el evitar que se privaticen o cierren las universidades”.
Delgado: “Había un fondo para universidades nuevas que es el PROUN, que viene encontrando fuertes reducciones. La universidad tiene 12 carreras, de las cuales todos los años se van abriendo nuevas materias. Esto implica la contratación de docentes, la compra de equipos. Si ese presupuesto no va creciendo, se hace muy difícil poder mantener el buen funcionamiento. Este es un problema que el año pasado se enfrentaron muchas universidades, tener que elegir entre pagar los servicios o los sueldos de los docentes, o becas estudiantiles, o pagar proyectos de investigación. Se suspendió la construcción de un edificio que estaba licitado y adjudicado, donde iba a haber oficinas administrativas, laboratorios y aulas que son extremadamente necesarias para que la universidad garantice una educación de calidad que permita incluir principalmente aquellos que tradicionalmente no podían acceder a la universidad de los grandes centros urbanos. Esto tiene que ver con poder garantizar condiciones de cursada que sean dignas”.
La UNTDF depende junto a otras 55 universidades nacionales, que cuentan actualmente con más de 2 millones de estudiantes, de la partida presupuestaria asignada en el Congreso de la Nación Argentina. De tal partida a la Universidad que tiene sedes tanto en Ushuaia como en Río Grande, le corresponde alrededor del 1%. De allí se debe dar cumplimiento con lo establecido en la Ley Nº 27204 de 2015, que promueve el ingreso irrestricto a la universidad, en la que el Estado debe entre otras cosas: “Garantizar la igualdad de oportunidades y condiciones en el acceso, la permanencia, la graduación y el egreso en las distintas alternativas y trayectorias educativas del nivel para todos quienes lo requieran. Proveer equitativamente, en la educación superior de gestión estatal, becas, condiciones adecuadas de infraestructura y recursos tecnológicos apropiados para todas aquellas personas que sufran carencias económicas verificables”.
El próximo viernes 15 de junio se realizará una “toma simbólica” de la universidad por parte de alumnos, en conjunto con los gremios docentes a fines de conmemorar los 100 años de la histórica Reforma Universitaria en defensa de la universidad pública.
