La palabra palíndromo proviene del griego palin dromein y significa “volver a ir atrás” o “que recorre a la inversa”. Para hacerlo más simple, sería una especie de palabra capicúa. Reconocer, Ana, anilina, Otto, oso, oro, ananá, arenera son palíndromos. Pero si redoblamos la apuesta encontramos frases palíndromas, ellas resienten su significado, se alargan y así con la longitud aumentan su complejidad. No es nada fácil leer igual de izquierda a derecha que de derecha a izquierda. Se cree que hay más de 82.228 palíndromos registrados en español. Algunos ejemplos de frases palíndromas: A Mercedes, ese de crema. Oí lo de mamá: me dolió. Y el alarido dirá la ley. Aunque también existe semi- palíndromos o bifrontes, las cuales son aquellas palabras que leídas al revés tienen una cambio o modificación en su significado. Algunas de ellas a modo de ejemplo pueden ser: rata-atar, zorra-arroz, amor- Roma, etc. Cabe la pena aclarar que no se tienen en cuenta las tildes y sus lugares.
El cuadrado Sator es un enigma sin solución (aún) que cuenta con más de ciento cincuenta años. Se sabe que es una especie de acertijo grabado en una de las paredes de las ruinas de Pompeya (en el año 1925 se lo encontró en los baños de Publio Paquio Próculo, el cual se cree que vivió junto a su esposa entre los años 74 y 50 a C. y otro fue hallado en una columna del gimnasio cercano al anfiteatro) esta especie de rompecabezas era aparentemente un juego entre los romanos, los cuales adoraban los pasatiempos. Un placer creado para la nobleza, la que tenía acceso a la escritura, la lectura y el ocio creativo.
Así este cuadrado mágico compuesto por cinco palabras latinas: SATOR, AREPO, TENET, OPERA y ROTAS fueron plasmadas en tablillas, tejas, puertas, monumentos y muros de diferentes continentes hasta llegar a convertirse en un amuleto el cual se creía que atraía la buena suerte. Si ellas son leídas de izquierda a derecha o desde arriba hacia abajo forman un conjunto de multipalíndromos. En verdad la suerte o la destreza consistía en descífralo.
Aunque sabemos que existen no solo palabras y frases, también hay poemas escritos con una estructura palindrómica. En verdad forman parte de un modo particular de contar apoyada en una mirada literaria, pero también matemática, donde la poesía, la narrativa y los números pueden abrirnos una puerta a la hora de realizar juegos donde lo que parece lejano o distante no es lo mismo.
“Dábale arroz a la zorra el abad” es una frase fabricada matemáticamente y calculada con precisión. Este juego de palabras no solo nos asegura un goce estético, sino también una simetría especial.
Fernando Pessoa (Lisboa, Portugal 1888- 1935) dijo: ”El binomio de Newton es tan hermoso como la Venus de Milo, lo que pasa es que muy poca gente se da cuenta”.