Siempre supimos que la Diputada Elisa Carrio, hoy en la Coalición Cívica y parte de la mesa chica de Cambiemos tiene una lengua viperina y cada vez que tiene la oportunidad, ya sea en la Cámara de Diputaos o en algún medio de comunicación le da libertad a ese órgano muscular.
Claro que últimamente ya no mide que o a quien “atender” y eso genera mucho malestar hasta en los que siempre la defendieron o inclusive se sumaban a sus críticas. Desde hace un tiempo Carrió, con la necesidad de demostrar poder dentro de Cambiemos busca la pelea con ciertos funcionarios del gobierno a los que ella dice públicamente no respetar, pero eso la fue llevando a un lugar complicado dentro del espacio ya que ahora son muchos los que plantean que “No está bien”.
Volvemos a hablar de la grieta, pero en este caso se genera en la mesa chica del ejecutivo después de los dichos de “Lilita” sobre el Radicalismo, una cosa es escucharla interpelar a la clase media pidiendo que dejen propina o en algún fursio en la cámara sobre las coimas, pero declararle la guerra a la UCR siendo parte del gobierno es muy distinto y no cayo para nada bien.
Los radicales de la provincia no se hicieron esperar y dijeron lo suyo sobre Carrió, el primero en contestarle fue presidente del bloque de Cambiemos en la legislatura Pablo Blanco que prefirió una carta abierta (está publicada completa al final de la nota) donde usó algunas frases tales como “Yo le diría a Lilita que tenga cuidado; no porque nos vayamos a ir sino porque todo vuelve”, “El radicalismo no tiene más dueños que sus afiliados. Nadie nos manda desde afuera, y mucho menos, alguien que ya no pertenece más al partido”.
Liliana Martinez Allende, Legisladora provincial del bloque Cambiemos dijo “Formamos parte de una coalición que tiene la misión de superar décadas de populismo en la argentina. Encontrar el camino del progreso sostenido es la misión, Carrió y cualquier dirigente es solo una circunstancia, no merece la pena desviarse en ello”.
El presidente de la UCR provincial, Federico Sciurano, también dijo lo suyo.
¿Es necesario Sra. Carrio?
Hay algo en lo que todos los argentinos deberíamos coincidir: el país necesita lo mejor de cada uno de nosotros para poder salir adelante. Es hasta lógico que discutamos con vehemencia temas que son muy sensibles en una sociedad que tiene miradas distintas, no me asusta que el kirchnerismo plantee posturas de la forma en que lo hace y exista la discusión de lo viejo, lo nuevo, de dónde venimos y hacia dónde vamos, porque en definitiva ese debate tiene un objetivo que también creo todos compartimos: queremos estar mejor.
Tenemos un camino difícil por recorrer y en esa dificultad si me asusta distraer la energía necesaria para buscar acuerdos con cuestiones de “cartelera” y una necesidad de protagonismo que envenena el futuro de la Argentina.
¿Es necesario maltratar a un partido político que se supone es un aliado? Es necesario tomar una estructura social centenaria que constituye parte de la base democrática del país para dar a entender que se es superior a los demás? Es necesario tomar un éxito electoral pasajero para canalizar todas las frustraciones de los fracasos del pasado? Es necesario exponer al Presidente de la Nación y al Gobierno Nacional para parecer “graciosa”, para sentir el glamour de las estrellas de stand up? Sin duda la respuesta en cualquier argentino que quiera lo mejor para el país es que no vale la pena.
El Radicalismo, con todos sus errores, ha sido, es y será un protagonista de nuestro futuro, porque en nuestra base existe el legado de dirigentes de la envergadura del Presidente Raúl Alfonsín, que contagia la vocación de entender que una sociedad sana debe tener a los que más necesitan primero y esa profunda convicción garantiza que nadie con pretensiones de “Súper Estrella” pueda manejarlo desde afuera o desde adentro.
La Democracia sin respeto es una democracia carente de madurez por eso nos preguntamos: ¿Es necesario señora Carrió?
Por último lo consulté al Concejal Tomás Bertotto, hoy más cercano a la Coalición Cívica que a el PRO, que planteo. “Carrió es de los pocos políticos sinceros y honestos del país capaz de decir la verdad e investigar seriamente”. “En estos tiempos Carrió es el compas que marca el rumbo de la Nación. Sus dichos resultan controvertidos a veces pero son lamentablemente reales y tan controvertidos como la realidad misma”.
“Carrió es una persona honesta y constantemente atacada por personas que perciben en ella un obstáculo político, generalmente se trata de individuos temerosos de tener que responder preguntas sobre sus incrementos patrimoniales desmesurados y rápidos por lo tanto cuanta cosa diga se magnificará, tergiversará y sacará de contexto”.
“Fue un comentario menor tendiente a despertar la solidaridad y el altruismo en quienes el comentario estaba dirigido. No tiene mucha importancia y no merece tanta reflexión de parte de los medios
Poniendo el tema en escala creo que hay otros muchos que lo sobrepasan en urgencia e importancia y de los que el periodismo de buena fe debiera ocuparse”.
Carta abierta del Legislador Pablo Blanco (Pte del bloque UCR-Cambiemos)
CUIDADO CARRIÓ: LA UCR ES NECESARIA
Cuando alguien dice barbaridades siempre es mejor no contestar. No tiene sentido engancharse en discusiones que sólo pueden terminar provocando un daño mayor al causado por el que la empezó. Pero habiendo visto y escuchado la manera burlona y sobradora con la que Elisa Carrió trató al partido que la vio nacer y le dio todo, no puedo menos que levantar la voz para hacer un par de observaciones con ánimo constructivo.
La primera de ellas es que Carrió nos necesita. Cambiemos necesita a los radicales para poder gobernar en todo el país y seguir ganando provincias. Por eso yo le diría a Lilita que tenga cuidado; no porque nos vayamos a ir sino porque todo vuelve. Ella no tiene la menor idea de en qué consiste gobernar; sólo despotrica desde su banca creyéndose dueña de la República. No sabe lo que es tener responsabilidades ejecutivas, lo que es tener que hacer en lo inmediato cosas que a uno no le gustaría. Su posición es muy cómoda, habla para la tribuna y cree que no tiene nada que perder. Es una pena que una dirigente con semejante trayectoria tenga siempre esa perversa inclinación a destruir lo que ayudó a crear y tanto cuesta mantener. Por eso le digo: cuidado Lilita, el país nos necesita a todos y Cambiemos precisa muy especialmente de la Unión Cívica Radical.
La segunda observación es netamente partidaria. El radicalismo no tiene más dueños que sus afiliados. Nadie nos manda desde afuera, y mucho menos, alguien que ya no pertenece más al partido. Que quede claro: estamos en Cambiemos porque decidimos orgánicamente integrar Cambiemos y formar una coalición de gobierno. El único organismo que puede decidir salir o permanecer es nuestra Convención Nacional partidaria. Cambiemos sólo tiene destino positivo si la cortamos con la negatividad y las agresiones internas que no conducen a nada más que a distraer el foco de atención. Si soportamos el ninguneo burlón de esta señora no es porque haya sacado el 60% de los votos en Capital sino porque entendemos que Cambiemos la excede y es algo muy superior a ella. La política es así: quien hoy está en el cielo mañana puede ir a parar al infierno. Lo sabe la propia Lilita que ha tenido perfomances electorales desastrosas; lo sabe el Presidente Macri que tiene soportarla más como lastre necesario que como desinteresado fiscal de la República.
Los fiscales de la República somos todos los ciudadanos que cuidamos a los gobiernos democráticos, respetamos a los partidos y deseamos que al país le vaya bien. Bueno sería que la señora Carrió comprenda que el país atraviesa por un momento muy delicado como para andar buscando grietas donde no las debe haber.