Técnico superior en Comunicación Social. Fanático del Periodismo Deportivo. Me gustan los deportes y la actualidad informativa.

En el fútbol y futsal estamos acostumbrados a ver cómo se destacan los varones en el juego, el arbitraje y la dirección técnica. En este ambiente por mucho tiempo se creyó que a las mujeres les sería muy difícil jugar, dirigir o ser réferi con el nivel que tienen los hombres. Sin embargo, las chicas demostraron que sí pueden participar en todas las áreas de estos deportes e inclusive ser mejores que los varones.

Este es el caso de Andrea Ortega, quién se animó a ser réferi y juez de línea en la Liga Ushuaiense, gracias a la pasión que desde pequeña le transmitió su padre por el fútbol y por el amor que tiene hacia el futsal desde que asistía como simpatizante a las gradas de los gimnasios para observar los partidos de sus amigos. Actualmente, ella ejerce el rol de juez en las canchas y asegura que las mujeres ushuaienses tienen un gran potencial en el fútbol y futsal.

Pregunta: ¿Cómo nació tu amor por el fútbol?

Respuesta: “En mi casa solo somos dos hermanas mujeres, entonces mi papá nos enseñó la pasión por el fútbol porque él no tenía con quien compartirla. Nosotras siempre le hicimos el aguante, vimos muchos partidos con él, nos levantábamos temprano para ver partidos del mundial con nuestro papá”.

Pregunta: ¿Por qué también te gusta el futsal?

Respuesta: “El futsal es lo que más me gusta. Hace nueve años atrás, solamente acompañaba a mis compañeros de trabajo cuando jugaban sus partidos amateur. Ellos fueron quienes me invitaron a los partidos de la Liga Ushuaiense y ahí comencé a sentir más interés por el deporte. Después, la pasión creció cuando la Selección Argentina salió campeona del mundo en fútbol de salón en el 2016, gracias a la participación de los hermanos Vaporaki”.

Pregunta: ¿Por qué elegiste ser juez en ambos deportes?

Respuesta: “Al principio comencé, hace tres o cuatro años, como planillera. Todo comenzó cuando en uno de los partidos que acompañaba a mis amigos del trabajo se me acercó el ex presidente de la Liga Ushuaiense, Marcelo González que me invitó a estar con el cronómetro y las planillas. Ahí me dí cuenta que todas las quejas que uno tiene en la tribuna con los réferis no tienen sentido.

Cuando Raúl Paredes asumió como el actual presidente de la Liga, él me incentivó a realizar el curso de arbitraje que dicta un instructor nacional que está acá. Luego de un año de aprendizaje comencé a dirigir en algunos partidos en la femenino e infantiles. No obstante, todavía siento que puedo mejorar mucho más porque recién éste año empecé con la Primera de Femenino, por eso sostengo que es un proceso largo el ser réferi.

En el fútbol inicié como línea éste año, pero acá es distinto al futsal porque el clima es muy duro y no hay muchas categorías. Por eso al principio no estuve en muchos partidos puesto que, es necesario adquirir experiencia con categorías inferiores y no con la primera. En este verano pasado me animé a dirigir partidos amistosos”.

Pregunta: ¿Cómo te tratan los jugadores?

Respuesta: “En fútbol sentí un poco el rechazo de los jugadores, por ahí porque es el primer año en el que estamos las mujeres como líneas. Es necesario educar al jugador para que se acostumbre a la presencia femenina. En futsal nos respetan tanto en inferiores como en infantiles”.

Pregunta: ¿Cuántas mujeres son réferis en la Liga Ushuaiense?

Respuesta: “Somos cuatro mujeres, todas de la misma escuela de árbitros. Entre ellas está mi hermana”.

Pregunta: ¿Cómo ves a las mujeres de Ushuaia en el fútbol y el futsal?

Respuesta: “Creo que hay mujeres con mucho potencial y que crecieron notablemente. Estaría bueno que se puedan realizar torneos nacionales para que las chicas puedan experimentar esa experiencia y crezcan aun más. Ojalá que se puedan abrir las puertas para que las mujeres tengan las mismas oportunidades que los hombres a la hora de competir ya que, no hay categorías femeninas en fútbol”.

Yo tuve la oportunidad de ver como crecieron las chicas en el futsal cuando me tocó estar en las planillas, es increíble cómo se nota el trabajo y el esfuerzo que hacen día a día. Me parece que se debe apoyar más a las mujeres porque muchas de ellas tienen un gran nivel”.

Andrea se convirtió en réferi gracias a la pasión que siente por el futsal y el fútbol desde muy temprana edad. En su rol como juez aprendió todas las virtudes y dificultades que tiene el oficio de arbitraje como también, pudo observar el crecimiento de las chicas en el futsal. Actualmente, ella sigue perfeccionándose en el oficio y disfrutando cada fin de semana de dirigir en el fútbol y futsal de la Liga Ushuaiense.

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