Periodista de Tierra del Fuego.

La segunda ola de COVID y las restricciones que ha reimpuesto, no sólo impactan en la economía de las personas, sino también en la vida. El conflicto de la provincia de Nequén, con los cortes de ruta, dejó varados a camioneros chilenos, impulsando un efecto dominó que impactó a sus pares santacruceños intentando llegar a la provincia por el paso con Chile. Ahora, las autoridades chilenas impiden la llegada de ayuda humanitaria, impulsada por el Sindicato de Camioneros de Tierra del Fuego, para aquellos varados.

Según la información que pasaba en la tarde de ayer el Secretario de Prensa del Sindicato, Guillermo Vargas, desde la frontera los carabineros le prohibieron ingresar porque tenían los permisos caducados.“ Nosotros en el día de ayer pasamos alimentos y parece que eso no le gusto a las autoridades chilenas y hoy nos prohibieron el ingreso diciendo que se habían caducado los permisos que hasta ayer estaban en vigencia”.

En un audio de WhatsApp, Vargas comentaba la situación que vivieron en el paso San Sebastián chileno. “No nos dejan usar los teléfonos celulares por lo cual nos tenemos que alejar para poder pasarle la información a los periodistas. Es más, dijeron que hasta que no haya una comunicación entre los presidentes de ambos países pidiendo que esto sea una ayuda humanitaria de catástrofe, no nos van a permitir ingresar nada. Nosotros tenemos preparadas 300 bolsas de alimentos pero lamentablemente no podemos ingresar”.

Desde la gobernación, Gustavo Melella hizo referencia al conflicto en su red cuenta de Twitter: “La situación que estamos viviendo nos demuestra una vez más que necesitamos concretar el cruce por aguas argentinas, tan soñado y anhelado por los fueguinos y las fueguinas. Esto nos afecta en muchos sentidos, primeramente en el abastecimiento de alimentos, combustible e insumos para la producción, pero lo que es más grave es que un argentino no pueda llegar a su propia tierra por una decisión ajena a su territorio. El cruce por aguas argentinas es el sueño de todos y todas, es #Soberanía».

Parece que el gobernador “aprovechó” la situación para imponer un proyecto del que hemos hablado largo y tendido en su momento, pero que con la actual situación económica es más un deseo que una realidad. Quedó la interrogante de si la Provincia está coordinando algún tipo de asistencia, al ser la institución más cercana geográficamente al problema, o al menos llamó a Nación, para que como en otras tantas ocasiones, les resuelvan sus problemas. Si bien desde Chile hablaron de “un diálogo de presidente a presidente” quizá la situación podría des-escalar con un llamado del mandatario fueguino a su par de la región chilena. No obstante, Melella se limitó a hacer política reflotando una idea que está lejos de la realidad de los ciudadanos de la provincia.

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