Periodista de Tierra del Fuego.

Hoy me propuse escribir algo que me dio mucha alegría leer y compartir y por eso decidí que no sería un lunes habitual haciendo editoriales políticas. Más allá de las elecciones en Mendoza o la primer marcha convocada por el presidente de la Nación, quiero compartir hoy una noticia que viene de la ciudad de Bahia Blanca. Esta, tiene como protagonistas a profesionales de la salud pública comprometidos no solo con el trabajo diario sino con dar amor, una palabra que solo la entendemos cuando nos falta.

Un grupo de profesionales del Hospital Municipal de la ciudad decidió hacer algunos cambios en el quirófano infantil para que los chicos no sufran tanto estrés y lleguen a la sala de operaciones más entusiasmados. En conferencia de prensa los profesionales contaron que pintaron los pisos, colocaron vinilos con dibujos animados y armaron una pista que permite que los chicos entren al quirófano en un auto que recibieron como donación.

El técnico en anestesia Pablo Aispuro y la médica anestesióloga Fernanda Peteta cuentan que se trata de un trabajo en equipo: “días antes de la cirugía algunos profesionales le cuentan al chico qué le van a hacer y le muestran el quirófano para que se sienta más cómodo al momento de la operación”.

«El día de la cirugía los premedicábamos para que entren más tranquilos, pero en muchos estudios se vio que eso tiene sus complicaciones como reacciones, retardo en el despertar (…) Con estas técnicas de distracción tratamos de reducir esa medicación para que los tiempos quirúrgicos sean más cortos», indicó la anestesióloga.

Según contó, los nenes entran con más confianza porque el lugar les resulta familiar: «Vemos la felicidad con la que entran al quirófano, se encuentran con un lugar que es un cuento”.

«A los superhéroes anónimos que nos regalaron el autito les agradecemos de corazón porque los nenes lo súper disfrutan», cerró la médica”.

Seguramente en la provincia tendremos iguales o mejores profesionales y esta nota no es ni a favor ni contra nadie, solo quise resaltar algo que tal vez en la locura diaria los comunicadores no vemos y no podemos compartir para que los ciudadanos nos demos cuenta que pasan muchas más cosas buenas que malas en nuestro país. Si los que nos conducen agudizarán la vista, tal vez se dieran cuenta que hay mucho potencial y solo necesitan eso – que los veamos-. 

Fuente: www.lanueva.com 

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