Licenciado en Estudios Orientales. Posgrado en Negocios y Comercio de Asia Pacífico e India. Política Internacional; extremismo religioso.

En horas de la madrugada del viernes, la tarde neozelandesa, dos mezquitas fueron atacadas por un grupo de personas aún desconocido que parecen estar vinculadas a grupos de extrema derecha en la isla Te Waiponamu, también conocida como South Island; más específicamente la ciudad Christchurch, donde habitan más de 400.000 personas.

Las mezquitas de Al Noor y otra en los suburbios de Linwood (de la que hay menos información al momento) fueron atacadas por un grupo de personas no identificado que dispararon contra los transeúntes y asistentes de las instituciones religiosas. La cadena Al Jazeera logró hablar con testigos del atentados, los cuales describieron “a un tirador, vestido de negro y con un casco cargando una ametralladora, entró por detrás a la mezquita y disparó contra los que estaban rezando allí”. Al menos 30 fallecieron en Al Noor, dentro de las víctimas se cuentan niños y mujeres. La polícia confirmó al menos otros 10 muertos en la mezquita de Linwood.

La primer ministro Jacinda Ardern (sobre quién ya escribimos un artículo), declaró que el evento fue un “ataque terrorista” y “este es y será uno de los días más oscuros de Nueva Zelanda”. El ataque demuestra un grado alto de planificación: se atacaron varios lugares en forma simultánea en el rezo del viernes por la tarde, el más popular y actividad donde se suelen concentrar las familias. A su vez, la policía local confirmó haber desactivado varios dispositivos explosivos en autos y acordonar otros lugares de riesgo, como una escuela secundaria. Es necesario destacar que los explosivos denominados “coche-bomba” requieren un grado de sofisticación alto y suelen ser un parámetro que los expertos en seguridad utilizan para determinar el grado de preparación con la que cuenta una organización terrorista.

De los 4 detenidos al momento (tres hombres y una mujer), uno es un ciudadano australiano. El primer ministro de dicho país, Scott Morrison, lo describió como parte de un grupo de extrema derecha. Aún es temprano para determinar pero el detenido habría elaborado un manifiesto donde desarrolla su ideología y posición anti-inmigración. Uno de los tiradores compartió a través de la red social Facebook parte del atentado en vivo.

Quienes casi quedan atrapados en la serie de atentados fueron los jugadores de la selección de cricket de Bangladesh (deporte popular en las ex-colonias británicas). Estos se encontraban en el país para realizar un amistoso contra sus pares neozelandeses y escaparon del atentado por minutos.

El atentado de hoy es el más importante en la historia moderna de Nueva Zelanda, dado que los “mass-shootings” o tiroteos masivos son extremadamente raros (como en el caso australiano). El registrado previamente data de 1990, cuando David Gray mató a 13 personas luego de una disputa con un vecino.

La presencia de musulmanes en Nueva Zelanda es nominal, son alrededor del 1% de los habitantes y está compuesta principalmente por inmigrantes y refugiados. En los últimos años ha habido un crecimiento considerable de los atentados contra mezquitas, perpetrados casi en su totalidad por grupos de extrema derecha locales, pero principalmente en los Estados Unidos, donde cerca del 31% de los tiroteos masivos suceden. La aparición de un grupo con este nivel de organización y sofisticación en un país como Nueva Zelanda pondrá a trabajar a las autoridades locales para evitar un efecto contagio en otras ciudades.

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